Más allá de la máscara: Un viaje hacia tu yo auténtico
julio 30, 2024
Cómo romper el control del ego
agosto 19, 2024
Como psicóloga y psicoterapeuta, he acompañado a muchos pacientes a aprender a vivir con el ego sin que este controle sus decisiones, siguiendo más su intuición a través de un conocimiento más profundo de sí mismos.
El ego y la intuición son dos fuerzas internas que moldean nuestra percepción del mundo. Sin embargo, operan desde lugares muy diferentes, llevándonos a experiencias vitales que pueden ser opuestas.
El ego es la voz interna que se alimenta de nuestras experiencias pasadas y de nuestras expectativas futuras, a menudo nos mantiene atrapados en un ciclo constante de comparaciones y evaluaciones.
El ego vive en lo que ya sucedió y en lo que podría suceder, perpetuando una danza entre el pasado y el futuro. Es esa parte de nosotros que insiste en revivir errores, lamentar decisiones, o anticipar posibles fracasos. En este viaje entre lo que fue y lo que podría ser, el ego genera culpa, miedo y ansiedad.
La culpa por lo que no se hizo bien, el miedo por lo que puede salir mal, y la ansiedad por el control que deseamos tener sobre un futuro incierto.
Cuando operamos desde el ego, nuestras acciones y decisiones están teñidas por una necesidad constante de validación, de asegurarnos de que no repetiremos los errores del pasado o que alcanzaremos lo que hemos imaginado para el futuro. Esto nos aleja del momento presente, nos desconecta de la realidad tal como es ahora, y nos impide disfrutar de la vida en su pura esencia.
La intuición, por otra parte, es una sabiduría interna que no necesita de argumentos lógicos o evidencias pasadas para guiar nuestras decisiones. Es un conocimiento profundo que surge de estar en sintonía con el presente, de confiar en nuestras capacidades y en la vida misma. La intuición nos invita a vivir desde la fluidez, a movernos con el ritmo natural de los acontecimientos, sin forzarlos ni resistirnos a ellos.
A diferencia del ego, que nos ancla en lo que fue o en lo que podría ser, la intuición nos mantiene conectados con el aquí y ahora. Es la voz que nos dice qué es lo correcto en este momento, no porque lo haya sido antes o porque garantice un resultado futuro, sino porque resuena con nuestra verdad más profunda en el presente.
¿Cómo vivir desde la intuición y no desde el ego?
Al aprender a escuchar nuestra intuición, nos liberamos de la carga del ego. De pronto, no es necesario anticipar todos los escenarios posibles ni revivir continuamente las decisiones pasadas que podrían frustrar nuestros planes o decisiones futuras.
Podemos confiar en que, en cada momento, sabremos qué hacer y cómo hacerlo. Esta confianza nos permite vivir con mayor ligereza, sin la necesidad de controlar cada aspecto de nuestra vida o de castigarnos por lo que no salió como esperábamos.
Vivir desde la intuición no significa ser irresponsables o despreocupados, sino cultivar una presencia consciente que nos permita actuar desde nuestra verdad interior. Es un acto de fe en nosotros mismos y en la vida, que nos libera de la carga de expectativas y nos permite fluir con el curso natural de los acontecimientos.
Mientras el ego nos mantiene atrapados en una espiral de culpa, miedo y ansiedad, la intuición nos invita a confiar, a vivir en el presente y a actuar de forma fluida con nuestra existencia y la vida.
Al aprender a distinguir entre estas dos fuerzas, podemos elegir conscientemente vivir desde nuestra intuición, permitiéndonos experimentar la vida con mayor autenticidad y paz interior.
Empezar a vivir desde la intuición, acallando la potente voz de nuestro ego, puede no parecer sencillo, pero desde el amor estoy dispuesta a acompañarte en el camino hacia tu interior para que puedas lograrlo, trabajando y cultivando un conocimiento profundo de tu yo, liberándote de carga, culpas y miedos que frenan tu autodesarrollo.
Estoy para ti. Con amor,
Maddalena Armenise
